Mercedes Clase S 400 d: habitación de lujo con vistas increíbles

Oído en la presentación nacional del nuevo Mercedes-Benz Clase S en Alcalá de Henares (Madrid): "Quien se gasta [bastante] más de 100.000 euros en un coche de esta categoría quiere que lo tenga absolutamente todo, aunque después de años de conducirlo verá que quedarán aplicaciones interesantísimas que ni habrá utilizado". Por supuesto, esta afirmación no se escuchó en los discursos de presentación del modelo, "el más avanzado de todos los Clase S fabricados desde 1972 y, por consiguiente, el coche más avanzado de la historia". Este último entrecomillado sí es el oficial de la casa alemana.
Por lo que detectan nuestros (limitados) sentidos, lo que ofrece esta séptima generación del buque insignia de Mercedes-Benz merecería semejante calificación. Para que se entienda mejor lo de la limitación de los sentidos de cualquiera de nosotros, baste un ejemplo: el sistema de sonido surround Burmester High-End 4D equipa 31 altavoces y ocho convertidores electrodinámicos o excitadores. ¿Lo apreciaremos todos por igual? ¿Alguien al 100%?
Violinistas ambientales
La excelencia del modelo no solo se percibe en lo que contiene, que daría para escribir un texto interminable e ilegible de tecnología de vanguardia de serie o en paquetes y opciones con sus precios, sino en cómo distribuye cada elemento, con qué materiales se han fabricado, de qué manera se han introducido y con qué ambientación se ha ahormado esta habitación con vistas al lujo. Oigan los violines.